sábado, 11 de marzo de 2017

11 - M 2004 ATENTADOS ESTACIÓN DE ATOCHA (MADRID) "Todos íbamos en ese tren"



Los atentados del 11 de marzo de 2004, conocidos por el numerónimo 11M, fueron una serie de ataques terroristas en cuatro trenes de la red de Cercanías de Madridllevados a cabo por una célula terrorista de tipo yihadista, tal como reveló la posterior investigación policial, sentenció la Audiencia Nacional y reiteró el Tribunal Supremo.

Se trata del mayor atentado cometido en Europa detrás del atentado de Lockerbieocurrido en 1988, con 10 explosiones casi simultáneas en cuatro trenes en hora punta de la mañana (entre las 07:36 y las 07:40). Más tarde, y tras un intento de desactivación, la policía detonaría de forma controlada dos artefactos que no habían estallado. Tras ello desactivaron un tercero que permitiría, gracias a su contenido, iniciar las primeras pesquisas que conducirían a la identificación de los autores. Fallecieron 193 personas, y 1858 resultaron heridas.

El de 2004 no fue el primer atentado de corte islamista perpetrado en España. Con anterioridad se había producido el atentado del restaurante «El Descanso» del 12 de abril de 1985, que causó 18 muertes.

DESCRIPCIÓN DE LOS ATENTADOS

Editar

Estación de Atocha, uno de los blancos de los atentados
"La zona horaria a la que se hace referencia en todos los casos es GMT +1, la hora local, a menos que se especifique lo contrario."

En la mañana del jueves 11 de marzo de 2004 en Madrid, España se produjeron diez explosiones provocadas por diez mochilas cargadas con alto explosivo. Los análisis científicos de los restos tras las explosiones dieron como resultado que se trataba de un explosivo del tipo de la dinamita. Las investigaciones posteriores, basadas tanto en la mochila que no estalló como en los restos hallados en el vehículo utilizado por los autores, determinaron que el explosivo utilizado por los islamistas fue Goma-2 ECO, del que se usa habitualmente en las canteras.

Como ya se ha indicado, las explosiones tuvieron lugar en hora punta, entre las 07:37 y las 07:39. En la estación de Atocha (tren n° 21431) (3 bombas), según la cinta de vídeo del sistema de seguridad de dicha estación: a las 7:37:47 ya se había producido la primera explosión; a las 07:38:36 se produce la segunda, en el coche 5; y a las 07:38:40 se produce la tercera, en el coche 4; en total se produjeron tres explosiones de dichas características.

Los artefactos estaban situados en los coches 1, 4, 5 y 6 (sobre el artefacto localizado en el primer coche del convoy, cabecera de tren, que no estalló inicialmente, se realizaron maniobras para su desactivación por los equipos TEDAX del Cuerpo Nacional de Policía(CNP), explosionando a las 09:59:18 (según la cinta de vídeo del sistema de seguridad); con posterioridad, a las 10:57:27 se procedió por los equipos TEDAX del CNP a realizar maniobras de desactivación sobre lo que consideraron un artefacto explosivo (que no resultó tal), en el segundo coche de la composición.

En la estación de El Pozo del Tío Raimundo hicieron explosión 2 bombas; en la estación de Santa Eugenia, una; y en un cuarto tren, junto a la calle de Téllez, en las vías que se encaminan a la estación de Atocha desde el sur, otras cuatro bombas. Las fuerzas de seguridad encontraron, en el interior de los mismos trenes, otros dos artefactos que habían fallado. Ambos fueron detonados por motivos de seguridad.

También se encontró una tercera bomba en la estación de El Pozo del Tío Raimundo, la cual realizó de forma inadvertida un periplo entre el IFEMA y varias comisarías de policía hasta ser finalmente examinada. Contenía 500 gramos de explosivo plástico Goma-2 ECO, metralla, un detonador y un teléfono móvil que hacía de temporizador, manipulado para que la alarma activase el detonador. Los indicios hallados en esa mochila permitieron establecer las primeras hipótesis firmes, y desencadenaron la persecución policial sobre los supuestos autores.

Cronología de los atentados (11 de marzo, 7:36 a 7:40)Editar

viernes, 10 de marzo de 2017

FERNANDO I DEL SACRO IMPERIO ROMANO GERMÁNICO (Aniversario Nacimiento)



Fernando I de Habsburgo (Alcalá de Henares10 de marzo de 1503-Viena25 de julio de 1564) fue infante de Españaarchiduque de Austriarey de Hungría y Bohemia y, a partir de 1558emperador del Sacro Imperio Romano Germánico. Era hijo de Felipe el Hermoso y de Juana I de Castilla y, por lo tanto, hermano menor de Carlos I de España.

El lema de Fernando fue «Fiat justitia et pereat mundus» ('Hágase la justicia aunque perezca el mundo').

(Alcalá de Henares, España, 1503 - Viena, 1564) Emperador de Alemania (1556-1564). Hermano menor de Carlos I de España, se educó en Castilla y fue visto con cierta simpatía por la nobleza castellana. Tras la elección de Carlos como emperador, Fernando se convirtió en uno de sus más fiables colaboradores, y le fueron concedidos amplios territorios, como Austria, Estiria, el Tirol y Alsacia, así como el título de Rey de Romanos. Tras la batalla de Mohács, en 1526, en la que murió el último rey Jagellón, Fernando logró hacerse con la Corona húngara, aumentando así sus dominios en el centro de Europa, lo cual lo dejó en la primera línea frente a la presión turca, que llegó a amenazar Viena en 1529. En el conflicto con los protestantes, Fernando se mostró más flexible que su hermano. Cuando éste abdicó, en año 1556, la Corona imperial pasó a Fernando y quedó asociada en lo sucesivo a su línea familiar.


Fernando I de Habsburgo

Segundo hijo de Felipe I el Hermoso y de Juana la Loca, Fernando permaneció en España cuando en 1504 su madre partió a Flandes en busca de su esposo. Tras la muerte ese mismo año de su abuela materna, la reina Isabel la Católica, se ocupó de su enseñanza como ayo y gobernador de la casa del infante Pedro Núñez de Guzmán, clavero de Calatrava. En 1506, el mismo día en que falleció su padre, los caballeros Diego de Guevara y Felipe Daula intentaron secuestrarle en su residencia de Simancas (Valladolid), acción que fue evitada por Núñez de Guzmán y por el hermano de éste, el obispo de Catania, quienes dieron parte a los oidores de la Cancillería de Valladolid; éstos ordenaron el traslado de Fernando a esta ciudad, donde permaneció hasta que Juana la Loca solicitó que lo llevasen junto a ella en la aldea de Hornillos (Valladolid). 

A mediados de 1508, con cinco años de edad, acompañó en un viaje por Andalucía a su abuelo Fernando el Católico, quien mostró por él gran predilección, hecho avalado por el testamento otorgado en 1512 en Burgos, en el que le encomendaba el gobierno de los reinos y los maestrazgos hasta la llegada del nuevo rey (el futuro Carlos I). Este documento, que había sido ratificado en un nuevo testamento dado en Aranda de Duero (Burgos) en 1515, quedó invalidado por otro definitivo elaborado en Madrigalejo (Cáceres) en 1516, en el que la regencia quedó asignada al cardenal Cisneros y a Alonso de Aragón; Fernando, en compensación, recibió una renta anual del reino de Nápoles, aunque conservó cierta popularidad que despertó el recelo de su hermano, Carlos I de España y V de Alemania

Por su parte, su abuelo paterno, el emperador Maximiliano I de Habsburgo, preparó el matrimonio de Fernando con Ana Jagellón (1521), hermana de Luis II de Hungría, enlace que le garantizaba la doble sucesión de Bohemia y Hungría. Los consejeros de Carlos I, temerosos de la importancia creciente de la facción fernandina, decidieron alejarle de la Corte, medida que fue ejecutada por el entonces regente, el cardenal Cisneros, quien en el mismo año en que se produjo el encuentro de los dos hermanos en las cercanías de Valladolid (1518), le envió a Flandes. 

Tras la muerte en 1519 de Maximiliano I de Habsburgo, Carlos I cedió a Fernando territorios patrimoniales que comprendían la Alta y Baja Austria, Carintia, Estiria y Carniola (Dieta de Worms, 1521), y posteriormente el Tirol, la Alta Alsacia y el ducado de Württemberg (convenciones de Bruselas, 1522). En 1526, tras la muerte en la batalla de Mohács de su cuñado, el rey húngaro Luis II, Fernando I de Habsburgo fue elegido rey de Bohemia, donde se le aceptó sin dificultad, y de Hungría, donde hubo de vencer la oposición del pretendiente Juan I, de la nobleza nacionalista y de los aliados otomanos. En 1531 fue elegido en Colonia rey de romanos y recibió en Aquisgrán las insignias de tal título. 

En los años siguientes Fernando I de Habsburgo intentó frenar la ofensiva turca que, remontando el río Danubio, amenazaba Viena, ciudad que pudo poner a salvo en 1532 con la ayuda de Carlos I, pero no pudo impedir que Solimán el Magnífico, aprovechando la confusa situación, se apoderara de Buda y de gran parte de Hungría; estos hechos le obligaron en 1545 a firmar una tregua a cambio del pago de un tributo anual y del reconocimiento de la dinastía de los Zápolya en Transilvania. En 1547 vinculó la Corona húngara a su familia.

Fernando I de Habsburgo recibió el título imperial en 1556, tras la abdicación de Carlos I, aunque la elección no se celebró hasta dos años después. Para la sucesión del imperio y para las coronas de Austria y Bohemia-Hungría designó a su hijo Maximiliano, el futuro Maximiliano II de Habsburgo (1564-1576). 

La política interior de Fernando I de Habsburgo estuvo marcada por la lucha contra los protestantes; en este sentido, Fernando secundó la actitud de su hermano, aunque la formación adquirida en Flandes, en contacto con el ambiente erasmista y humanista, le hizo adoptar una postura conciliadora y tolerante, opuesta a la intervención armada. Esta actitud quedó ejemplificada en la asamblea de Ratisbona (1524), donde se acordó una primera reforma católica que afectó a la disminución de fiestas de precepto y a la entrega a los príncipes laicos de una quinta parte de las rentas eclesiásticas. 

Otras acciones llevadas a cabo por Fernando en materia religiosa fueron la constitución en 1529 de la Unión Cristiana, formada por los cinco primitivos cantones católicos suizos y destinada a combatir el protestantismo; la firma de la paz de Kadan (1534) con la Liga de Esmalcalda, por la cual se impedía a la Reichkammergericht proceder contra sus propios miembros; la protección a la Compañía de Jesús; la represión de una revuelta organizada en Bohemia en 1547 que pretendía ciertas reformas eclesiásticas; la negociación del tratado de Passau (1552); los esfuerzos para conseguir que Roma autorizase la comunión bajo las dos especies (1554); diversas acciones encaminadas a atenuar el conflicto religioso mediante la paz de Augsburgo (1555), a la que se oponía su hermano Carlos I; y la defensa de la libertad de conciencia hecha en la reapertura del Concilio de Trento (1562). Llevó a cabo también la reforma del sistema monetario y la reorganización del consejo áulico.

FERNANDO II DE ARAGÓN (Aniversario de nacimiento)


Fernando II de Aragón, llamado «el Católico» (Sos, 10 de marzo de 1452-Madrigalejo, 23 de enero de 1516),fue rey de Aragón (1479-1516), de Castilla(como Fernando V1474-1504),de Sicilia (1468-1516) y de Nápoles (como Fernando III, 1504-1516). Fue además regente de la corona castellana entre 15071516, debido a la inhabilitación de su hija Juana I de Castilla, tras la muerte de Felipe el Hermoso.

Resistió el asedio del ejército de la Generalitatdurante la Guerra Civil catalana (1462-1472). Fue gobernador general de Aragón y Cataluña en 1466 y dos años más adelante corregente de Sicilia.

Al casarse con la princesa Isabel de Castilla, hermana de Enrique IV, proyectó su figura hacia la política de Castilla, luchando eficazmente contra las pretensiones al trono de Juana la Beltraneja. La guerra de Sucesión se cerró con el Tratado de Alcaçovas (1479).

Al fallecer su padre y gracias a su boda se produjo la unión de la Corona de Aragón con la de Castilla, respetando las leyes e instituciones de cada reino.

Como rey de Aragón introdujo la insaculación (sorteo) en la elección de cargos y aplicó medidas proteccionistas al comercio y a la industria. Una nueva insurrección de los remensasllevó una solución pactada: la Sentencia Arbitral de Guadalupe(1486). Consiguió la restitución del Rosellón y la Cerdaña (1493) y conquistó el reino de Nápoles. En 1492 finalizaba, junto a su esposa, la reina de Castilla Isabel I, la conquista del reino musulmán de Granada, con la que se daba por terminada la Reconquista.

Entre 1484 y 1496 las Islas Canarias fueron conquistadas y colonizadas, y se produjo el descubrimiento de América por Cristóbal Colón.

Los Reyes Católicos responde al título que les otorgó el papa Alejandro VI en 1496. Uno de los principales problemas de política interior era la cuestión religiosa: para controlar la fe de los conversos se creó la Inquisición (1478). Los judíos fueron expulsados en 1492 y sólo una minoría se convirtió. La población musulmana optó mayoritariamente por la conversión (1502) -moriscos- y únicamente unos pocos fueron expulsados. Su política matrimonial de alianzas con Portugal, Inglaterra y la Casa de Habsburgo dio frutos positivos.

El rey había asumido la Corona castellana tras la muerte de Isabel (1504), pero se retiró a causa de la poca aceptación por parte de la nobleza castellana y se la cedió a su hija Juana. La muerte de Felipe el Hermoso, su yerno, hizo que fuera aceptado de nuevo como regenteNavarra se incorporó al reino de Castilla (1515), se conquistaron algunas plazas del norte de África -Orán y Bujía- y se obtuvo la sumisión del rey de Argel.

En 1506 Fernando II volvió a contraer matrimonio con Germana de Foix. La precoz muerte del hijo de este matrimonio y el nombramiento de su nieto Carlos (el futuro Carlos I y emperador Carlos V) como gobernador general de sus reinos hizo que, a su muerte, se consolidara la unión dinástica entre los reinos de Castilla y Aragón.

Fernando II hizo testamento el 22 de enero, y falleció un día después, el 23 de enero de 1516 a las 2.00h de la madrugada en MadrigalejoCáceres

miércoles, 8 de marzo de 2017

URRACA I DE LEÓN (Aniversario de su muerte)


Un día como hoy del año 1126 fallecía en Saldaña la Reina de León, Urraca I de León

Urraca I de León (León, 24 de junio de 1081-Saldaña, 8 de marzo de 1126), llamada por sus coetáneos y los historiadores de la época como la Temeraria fue reina de León entre 1109 y 1126. Hija y sucesora de Alfonso VI y de la reina Constanza de Borgoña, fue sucedida por su hijo Alfonso VII.

REINA DE GALICIA

Primera hija del rey Alfonso VI de León y de su segunda esposa Constanza de Borgoña, el nacimiento de su medio hermano Sancho en 1093 la apartó de la línea sucesoria al trono de su padre.

En 1095, Urraca contrajo matrimonio con Raimundo de Borgoña, un noble borgoñón que llegó a León tras la Batalla de Sagrajas respondiendo al llamamiento que Alfonso VI realizó a la cristiandad europea con la intención de organizar una cruzada contra los almorávides que asolaban sus reinos.

En 1095, a raíz del matrimonio de otra de las hijas de Alfonso VI, Teresa de León, con Enrique de Borgoña, el monarca dividió Galicia en dos: el Reino de Galicia fue concedido a Urraca y Raimundo, y el condado Portucalense, que comprendía las tierras entre los ríos Duero y Miño, que correspondió como dote a Teresa y Enrique y que con el tiempo daría lugar al reino independiente de Portugal.

REINA DE LEÓN

ASCENSIÓN AL TRONO

Edit

En 1108 falleció su hermano
 Sancho en la batalla de Uclés. La muerte del único descendiente varón de Alfonso VI convierte a Urraca, que había enviudado un año antes, en la candidata mejor situada para suceder a su padre, quien reúne en Toledo a los nobles del reino y les comunica el hecho, hasta entonces insólito, de que ella es la elegida para sucederle.

Los nobles aceptan la designación real pero exigen que Urraca contraiga un nuevo matrimonio. Inmediatamente surgen varios candidatos para desposar a la heredera al trono, entre los que destacan el conde Gómez González y el conde Pedro González de Lara. Alfonso VI, temiendo que las rivalidades que existían entre los nobles castellanos y leoneses se incrementaran por este motivo, decide casar a Urraca con el rey aragonés Alfonso el Batallador. El matrimonio se celebra en 1109 en el castillo de Monzón de Campos, con el alcaide de la fortaleza, Pedro Ansúrez, apadrinando el enlace, sin que quede del todo claro si fue antes o después de la muerte del rey Alfonso VI.



Primera etapa (1109-1110

Editar

Monasterio Real de San BenitoSahagúnLeón, lugar de refugio de la reina Urraca frente a su marido Alfonso I de Aragón.

El matrimonio entre Urraca y Alfonso se inicia con la oposición de distintas facciones políticas contrarias a la unión por motivaciones muy distintas. Una primera facción estaba formada por el clero francés, que se había visto muy reforzado gracias al origen borgoñés del primer marido de Urraca y que temía perder sus privilegios.

Una segunda facción tenía su centro en Galicia, y su rechazo a la unión entre Urraca y Alfonso venía motivado por la pérdida de los derechos al trono leonés del hijo de Urraca, Alfonso Raimúndez. En efecto, uno de los primeros actos que hicieron los monarcas fue firmar un pacto según el cual los cónyuges se otorgaban recíprocamente potestad soberana en el reino del otro, declaraban heredero de ambos al hijo que pudieran engendrar, y que si de la unión entre ambos no naciera heredero alguno, cada cónyuge sucedería al otro en caso de muerte de alguno de ellos. Este sector se encontró desde un primer momento dividido en dos tendencias: una encabezada por el obispo de Santiago de CompostelaDiego Gelmírez, que defendía la posición del infante Alfonso como sucesor de Urraca; y otra encabezada por Pedro Fróilaz, conde de Traba y tutor del príncipe Alfonso, quien se inclinaba por la independencia de Galicia, cuyo trono ocuparía Alfonso.

Un tercer grupo opositor al matrimonio real radicaba en la misma corte y estaba encabezado por el conde Gómez González, y la motivación de su oposición venía dada por su temor a la pérdida de poder, sensación que se vio pronto confirmada cuando Alfonso I nombró a nobles aragoneses y navarros para importantes cargos públicos y como alcaides de los castillos y enclaves leoneses y castellanos.

Será el conde de Traba quien desde Galicia inicie el primer movimiento agresivo contra los monarcas cuando reclamó los derechos hereditarios del infante Alfonso. En respuesta a la rebelión gallega, Alfonso el Batallador se dirigió al frente de su ejército hacia Galicia y, en 1110, restableció el orden en el condado rebelde al vencer a las tropas gallegas en el castillo de Monterroso.

La rebelión gallega contra el poder real fue sólo el comienzo de una serie de conflictos políticos y bélicos que, los caracteres opuestos de Urraca y Alfonso y su antipatía mutua, van a alentar en los sucesivos años y que van a sumir a los reinos hispánicos en una continua guerra civil.

Pronto se diferencian dos tendencias en la facción opuesta al matrimonio radicada en la propia corte. Una apoya a Alfonso como soberano y está integrada por la baja nobleza y las grandes ciudades que bordean el Camino de Santiago deseosas de deshacerse de los señoríos eclesiásticos; la otra apoya a Urraca y está formada por la alta nobleza y el clero que trabajará activamente para lograr la anulación eclesiástica del matrimonio argumentando ante el papa Pascual II que el mismo era incestuoso debido a la consanguinidad de los esposos (ambos eran biznietos de Sancho Garcés III de Pamplona). El pontífice amenaza con la excomunión de los monarcas si éstos no anulan el matrimonio. La reina afirmaba, según escribe Jerónimo Zurita en los Anales de la Corona de Aragón, que

aunque el matrimonio se efectuó muerto el rey, su padre, con voluntad y orden los grandes de su reino, fue contra la suya y que recibió muchos denuestos y se le hicieron malos tratamientos por el rey de Aragón y que usaba gran tiranía y echó a los obispos de Burgos y León de sus iglesias, y prendió al de Palencia, y desterró al obispo de Toledo por dos años de su diócesis siendo legado de la sede apostólica, y que sacó del Monasterio de Sahagún al abad y puso en él a don Ramiro, su hermano. Era la pasión tan terrible, que la reina afirmaba que con gran furor y odio procuraba la muerte del infante, creyendo suceder en el reino. Y con esto iban incitando y conmoviendo contra él los pueblos.

Urraca decide alejarse de Alfonso y se refugia en el monasterio de Sahagún. Alfonso I recibe noticias de que el arzobispo de Toledo está maniobrando para obtener la nulidad matrimonial, lo que junto a los rumores de que la reina mantiene una relación amorosa con el conde Gómez González hace que decida encarcelar a Urraca en la fortaleza de El Castellar y dirija su ejército contra todas aquellas plazas castellanas que se habían posicionado a favor de Urraca. Tomó PalenciaBurgosOsmaOrenseToledo, donde depuso al arzobispo, y Sahagún, donde depuso al abad del monasterio. (Véase: Primera revuelta burguesa de Sahagún).

El conde Gómez González junto con el conde Pedro González de Lara logran liberar a la reina, que busca refugio en la fortaleza de Candespina, ubicada en Fresno de CantespinoSegovia.

Segunda etapa (1111-1114)Editar

El rey entonces decidió plantar cara a la situación y lo hizo en la batalla del Campo de la Espina o Candespina (26 de octubre de 1110), en la cual salió victorioso gracias al apoyo militar que recibió de la hermanastra y del cuñado de Urraca, los condes de Portugal Teresa y Enrique. Jerónimo Zurita describe la batalla de la siguiente manera:

Comenzándose a herir de ambas partes la batalla, desamparó luego el conde don Pedro González el estandarte real, y salió huyendo del campo y el conde don Gómez con los castellanos de su batalla estuvo firme en ella, pero fueron a la postre desbaratados y vencidos y quedó el conde Gómez vencido y muerto en el campo.

Sin embargo, la entrada de Alfonso en Toledo, cuya cesión pretendían Teresa y Enrique, hizo que Enrique intentase un pacto con Urraca, pero la animadversión que se tenían las hermanastras hizo que finalmente Urraca se reconciliase con su marido Alfonso obligando a los condes de Portugal a retirarse a sus dominios.

La reconciliación matrimonial vuelve a quebrarse cuando Urraca se entrevista con la nobleza gallega y acepta que su hijo Alfonso sea proclamado rey de Galicia. La coronación se lleva a cabo en Santiago de Compostela el 17 de septiembre de 1111 y provocará las iras de Alfonso I de Aragón y nuevos enfrentamientos entre los soberanos a lo largo del año 1112, destacando los que tuvieron como escenarios a ciudades como Astorga y Carrión de los Condes, y que terminarían con una nueva tregua que habría de romperse al año siguiente en Burgos, cuando la reina, apoyada por las tropas del obispo de Santiago de CompostelaDiego Gelmírez, sitió la ciudad. Alfonso decide entonces abandonar sus aspiraciones territoriales sobre los reinos de su esposa y, basándose en los argumentos que utilizaron los que desde un primer momento querían declarar nulo su matrimonio, repudiar a Urraca, hecho que se hizo efectivo en un concilio que se celebró en Palencia en 1114.

Tercera etapa (1115-1126)Editar

Castillo de Saldaña (Palencia), lugar del fallecimiento de la reina Urraca.

La retirada de Alfonso I no supondrá la desaparición de los conflictos, ya que éstos se desplazan nuevamente a Galicia donde, en 1115, el conde de TrabaPedro Fróilaz, y el obispo de Santiago de Compostela, Diego Gelmírez, intentan aumentar la autonomía del hijo de la reina, Alfonso, como rey independiente de Galicia. La reina decide entonces apartar a su hijo Alfonso Raimúndez de la influencia de su tutor, para lo cual se dirige al frente de su ejército a Santiago y cerca la ciudad. Gelmírez y el conde de Traba pactan luego con Urraca y mientras se entrevistan con ella, la población se amotina y en la revuelta popular Urraca fue rodeada, golpeada y en un barrizal fue desnudada, humillada y vejada y hasta se dice que alguien que estaba allí le tiró una piedra que le dio en la cara saltándole varios dientes y muelas. Tras huir, la reina sitió la ciudad hasta su rendición, sometiéndola posteriormente a una fuerte represión.

En 1117, Urraca I fue cercada en el Castillo de Sobroso por los partidarios de su hijo y su hermana Teresa de León, pero consiguió escapar y volver a Santiago de Compostela, tal y como se relata en la Historia compostelana. Más adelante Urraca consolidó la relación con los partidarios de su hijo firmando el Pacto del Tambre, en el que reconocía la legitimidad del infante Alfonso para sucederla en el trono. Sin embargo, la paz sólo se prolongó hasta 1120 cuando nuevamente se enfrentó al conde de Traba, con el que tuvo que volver a pactar en 1121 debido a la invasión que desde el condado portucalense encabezó su hermanastra Teresa y que repelió cruzando el río Miño y venciéndola en Lanhoso, con lo que consiguió que esta le reconociese como soberana.

Los últimos años del reinado de Urraca son poco conocidos por la falta de documentos claros. De su estudio se desprende que no cesó la guerra civil hasta su muerte en el año 1126, ocurrida en el castillo de Saldaña. Ese mismo año, su hijo Alfonso, llegado de Galicia, sería coronado también rey de León, como Alfonso VII de León, más tarde llamado el Emperador

SEPULTURA

Panteón de Reyes de San Isidoro de León, donde fue sepultada la reina Urraca I de León.

Después de su defunción en la localidad de Saldaña, el cadáver de la reina Urraca fue conducido a la ciudad de León, donde recibió sepultura en el Panteón de Reyes de San Isidoro de León, recuperando así la tradición de los reyes de León de sepultarse allí, tradición que había sido rota por su padre, Alfonso VI de León, quien recibió sepultura junto a la mayoría de sus esposas, entre ellas Constanza de Borgoña, madre de la reina Urraca, en el Monasterio de San Benito de Sahagún.[3] Sus restos fueron depositados en un sepulcro de mármol liso, desaparecido en la actualidad, sobre cuya cubierta aparecía la imagen esculpida de la reina. En el sepulcro fue colocado el siguiente epitafio latino:

H. R. DOMNA URRACA REGINA, MATER IMPERATORIS ALFONSI, HOC URRACA JACET PULCRO REGINA SEPULCHRO. REGIS ADEFONSI FILIA QUIPPE BONI. UNDECIESCENTUM DECIES SEX QUATUOR ANNOS MARTIS MENSE ORAVI, CUM MORITUR NUMERA.

MATRIMONIOS Y DESCENDENCIA

La reina Urraca se casó en primeras nupcias con el conde Raimundo de Borgoña, hijo del conde palatino Guillermo I de Borgoña. Habían estado comprometidos desde 1087, aunque el matrimonio no se celebró hasta 1095 en la ciudad de Toledo. Fruto del primer matrimonio de la reina nacieron los siguientes hijos:

  1. Alfonso VII de León (1105-1157). Sucedió a su madre en los tronos de León y de Castilla.
  2. Sancha Raimúndez (1102-1159).

Contrajo un segundo matrimonio con Alfonso I el Batalladorrey de Aragón, matrimonio del cual no hubo sucesión y que se declaró nulo posteriormente a causa de la consanguineidad de los dos contrayentes.

Según las crónicas antiguas, relatadas por Jerónimo Zurita, el conde Pedro González de Lara, hijo de Gonzalo Núñeztenente en Lara y Osma, y de Goto Núñez, quien gozaba de la privanza de la reina

... nunca perdonó a su mismo honor ni hizo diferencia de los maridos a los adúlteros, pensó en casar con ella, y poníase muy delante en los negocios de todo el reino, presumiendo de mandar y vedar como absoluto señor. Pero ella no se sabía sujetar ni a su afición ni a la ajena.

Los condes y ricoshombres de Castilla no consintieron el matrimonio y Gutierre Fernández de Castro prendió al conde Pedro y le encerró en el castillo de Mansilla.

De su relación con el conde Pedro González de Lara nacieron al menos dos hijos:

  1. Elvira Pérez de Lara (c.1110-1174), quien casó por primera vez con el conde García Pérez de Traba, señor de Trastámara, hijo del conde Pedro Froilaz. Posteriormente contrajo un nuevo matrimonio con el conde Bertrán de Risnel, señor de Carrión.